Políticas Económicas dificultan el adelanto de la Mujer

Sara Lovera enviada de CIMAC

Lima, Perú, 6 de febrero

Las discusiones de la VIII Conferencia Regional sobre el adelanto de la mujer que comenzará aquí el próximo martes firmará un documento de nuevas acciones y compromisos luego de analizar los resultados de 5 años de acción. La mayor dificultades los gobiernos es admitir que el adelanto de la mujer en la región está frenado por las políticas económicas  aumentaron los factores de exclusión.
Por ejemplo: disminuyó el empleo femenino; se desmantelaron los servicios de salud y aumentó el porcentaje de mujeres viudas o enfermas de edad avanzada que están padeciendo nuevas formas de opresión.
El documento de política, cuya ultima versión aún sin acuerdo, reconoce las dificultades más importantes para el avance de las mujeres se centran también en el mantenimiento de viejas costumbres y dificultades para el cambio de mentalidades, tanto en gobiernos como en la sociedad.
Peor aún es que este balance de resultados puede resultar ficticio porque los gobiernos no han mejorado, como se esperaba, los sistemas estadísticos por sexo, lo que significa que se puede estar hablando de hechos inexistentes o no suficientemente claros.
Este lunes el comité directivo de la Conferencia Regional realizará su primer contacto informal con las más  de 200 mujeres de organizaciones no gubernamentales de 25 países que están haciendo su propio balance.
Al respecto la cuestión del ajuste estructural, analizada por la Red  el Banco Mundial en la Mira de las Mujeres, estableció que tres cuestiones han sido determinantes para el deterioro de las condiciones de vida de millones de mujeres en América Latina: la deuda externa, que creció en forma importante en los últimos 5 años; el establecimiento de políticas impositivas que afectaron el salario de las mujeres y los hombres trabajadores, así como el consumo de las familias y los acuerdos que llevaron a profundizar las privatizaciones.
Medidas que impactaron igualmente fueron las que se refieren a las recomendaciones de Banco Mundial para desmantelar los sistemas de seguridad social; la mercantilización de la educación superior y las privatizaciones de los servicios públicos.
La experta en el tema, la economista mexicana Laura Frade, planteó a las mujeres de las ONG la urgencia de adoptar medidas de presión política para que los gobiernos de la región discutan con la sociedad civil los acuerdos que firma con los organismos multilaterales; las políticas que establece en las élites y los nuevos endeudamientos que en general benefician a los grandes capitales en detrimento de la población.
Recomendó igualmente que a propósito del proceso de revisión de Pekín, se establezca una estrategia continental para solicitar la participación de las mujeres en la elaboración de los presupuestos estatales; en la definición de programas sociales y en aquellas cuestiones que solamente los ministros de finanzas discuten con los ejecutivos o con los bancos internacionales.
Este lunes las ONG definirán estrategias de negociación con las delegaciones oficiales que asisten a la VIII Conferencia Regional y las acciones que deberán realizar antes de las sesiones extraordinarias de Naciones Unidas que ratificarán o modificarán el PAM para el adelanto de la mujer en todo el mundo. Por lo pronto el diagnóstico social halló rezagos importantes; no atendió problemas centrales como el de la situación de las mujeres del campo  -indígenas y no- y no realizó acciones para mejorar la ética de los medios de comunicación.